viernes, 6 de agosto de 2010

Arrorró para dormir la siesta


Leerle un cuento a los niños antes de dormir, representa más que la simple actividad de arruyarlos. Éstos aportan beneficios como:

• Estimular el lenguaje y la imaginación,
• Relajarlos, creando lazos y vínculos más fuertes con el lector.

Un ratito de siesta para los más pequeños.

Para los niños descansar es fundamental y resulta imprescindible en los menores de cinco años.
La siesta es una costubre que consiste en descansar y entamblar un sueño corto (Período mínimo de 20 mts a 2 hs).Ésta es una práctica que aporta beneficios, como: recuperar energías y sentirse en forma. Con la siesta los niños crecen y se desarrollan.
Con el crecimiento del bebé, sus horas de sueño se concentran por la noche, es aquí cuando se hace necesario un ratito de siesta.
Algunos niños, aproximadamente a los tres años, no quieren dormir , por esto, resulta como una buena estrategia contemplar este momento de descanso dentro de una rutina diaria, sin obligar.
Invitar a los niños a dormir utilizando frases como: ¨ Vamos a descansar un ratito¨, adopatar la costumbre de contar un cuento, elegir un muñeco para que lo acompañe, mirar fotografías, escuchar música suave o llevar a cabo actividades tranquilas, que favorezcan la relajación y permitan que el niño duerma.
Cada niño dormirá la siesta según las necesidades de su organismo.

                                                                  PALMIRA


Palmiara. ¡Qué lindo nombre! ¡Me gusta ese nombre!
Pal-mi-ra. Suena divertido y tiene olorcito a palmeritas recien horneadas.
Palmira, si , si, si, mi pequeñita amiga hada. ¡Con carita de princesa enamorada! Con cachetes colorados, pequitas y pelito rizado.
Una hadita tan pero tan chiquita que no se ve nada. Casi, casi invisible, vive en mi casa.
Un día, Palmira me pidio que le regalara... un par de pantuflas a rayas.
¿Dónde iva a conseguir pantuflas para hadas?. Hay para niños, señores, señoras...Pero ¿Para hadas?
Camine por todos lados, preguntando y preguntando, solo decían que no y todita la gente me miraba extrañada, con gestitos de sorpresa preguntaban ¿Pantufles para hada? De eso... no tenenos nada.
"Yo no se de que se admiran. ¿Quién no tiene un hada en su casa?"
Como paso, no lo se , pero de repente una idea se me ocurrió, para hacer las pantuflitas a Palmira.
No crean que fue mucho trabajo, los piecitos de mi amiga son como dos garbanzos. Solo use algunas cosas: dos botones de madera y una cinta paseandera, rayada.
¡Qué lindas quedaron!
Palmira esta feliz por que tiene lo que queria, un par de pantuflas a rayas.
Y yo también, estoy felíz, porque cuando ella camina los botoncitos van sonando como campanitas y me avisan que por aquí y por allá, anda mi hadita. Palmira.
Pal-mi-ra.
¿Lindo nombre, no?
                             LAURA E. PADRONE.      

1 comentario:

  1. Hola Laura!
    Gracias a tu comentario te conozco ,lamento no haberme dado cuenta antes!Quiero que sepas que no fue mi intención rechazarte.
    Besitos!

    ResponderEliminar